martes, 7 de febrero de 2012

Sinsentidos que cobran sentido.


Suelen decir que todos venimos al mundo por algo.

Gutenberg inventó la imprenta, Fleming la penicilina, y probablemente nos encontremos entre el inventor del remedio contra el cáncer.
Pero un día te paras a pensar y miras a tu alrededor, y ves como la mayoría destaca. Algunos en deportes, otros en estudios, otros en cosas artísticas como la fotografía o el dibujo...
Sí, son tonterías al fin y al cabo (tampoco es que vivamos rodeados de genios que vayan a solucionar el mundo), pero las tonterías justas para infravalorarte y pensar ¿qué hago yo aquí?.

Yo en esos momentos prefiero pensar, pensar de manera global. Alejar mi vista como si fuera un satélite que ve la tierra desde el espacio, y acercarme poco a poco a los diferentes países, las diferentes ciudades, las diferentes historias... Y es que, ¡hay tantas historias!

En una casa veo una familia, una familia de África en la que los niños están trabajando, a estas horas. No están jugando con muñecas ni con coches, están trabajando.

Cambiamos entonces a otro sitio, es en América, en la calle, un vagabundo; tenía éxito y familia, pero un día lo perdió todo, y ahora vive en un cajero automático.

Sin embargo, por último te vas acercando, a tu país, a tu ciudad, a tu casa. Y ves como tienes un hogar, mejor o peor, pero un hogar caliente y una familia. Es entonces cuando piensas, ¿y a mí que más me da que no sepa todavía mi meta en el mundo?.
Lo mismo no seamos los que acaben con las guerras, ni con el hambre, pero tenemos posibilidades, y básicamente TENEMOS, porque aquí estamos, y eso simplemente es ya un regalo.
¿Por qué estoy yo en el mundo?, pues no lo sé, pero si sigo estando a pesar de que cada día mueren millones de personas, será por algo, y seguramente sea algo maravilloso.

"Todo hombre tiene derecho a dudar de su tarea y a abandonarla de vez en cuando: lo único que no puede hacer es olvidarla" Paulo Coelho

2 comentarios:

  1. Sí, todos hemos venido para algo- Hay veces que ese algo no es una sola cosa grande, sino que puede ser millones de cosas pequeñitas, y que si las sumamos todas, hace de esa persona algo maravillosa. Algo enorme.

    Gracias por hacernos (hacerme) reflexionar aunque sea por estos cinco minutos que dura mi café mientras navego por Internet buscando cosas que me motiven.

    Gracias también por motivarme.

    Ves? que dos cosas más simples?? Pues te aseguro que no lo son!

    Un abrazo!

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  2. Acabo de descubrir tu blog, me encanta esta entrada y he echado un ojo a demas posts y me gustaron mucho tambien. Asi que, te sigo desde ya! Me pasaré siempre que pueda por aqui. Seras bienvenida a mi blog, si te apetece visitarlo. Un beso
    http://rafael1garcia.blogspot.com/

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